No queda nada de este año, se me fue volando.
Parece que cada año se va más rápido que el anterior.
Por un lado, he intentado disfrutar cada día, y solamente vivirlos, pero siempre hay algo, una excusa para estar ansioso para que llegue el día siguiente, o cuando cuando el apestamiento llega a lo máximo y uno solo quiere que termine el día de una vez por todas.
No es para nada fácil, bueno por algo hay tantas disciplinas que buscan el vivir el presente, que debería ser lo más natural del mundo.
Jajaja, de hecho me acabo de dar cuenta que partí la entrada hablando como si el año ya se hubiera acabado y todavía quedan unos cuantos días que disfrutar. Es que estoy ultra ansiosa, ya que junto con empezar un nuevo año, ese día parto a el viaje más grande que he hecho en mi vida, me voy a China, ya tengo a medio mundo vuelto loco con esta historia, pero es que estoy muy emocionada. Es un viaje que quería hacer desde hace muchos años, y en algun momento parecía muy lejano, y ahora está ahí.